El respeto a lo ajeno (Historias del Más Ojey #1)

Pues sí, parece ser que las frasecillas del Benemerito de las Americas (lo que hacemos para no decir Benito) son útiles y prácticas para adornar pendones, y promos. Pero, en la vida cotidiana, a los compatriotas la idea del respeto al derecho ajeno... es eso, una pobre idea que es únicamente válida cuando somos el violentado, si somos el abusador siempre habrá excusas como:

• Es que nomás es un momentito
• Todos lo hacen.
• ¿Qué tanto es tantito?
• ¿Qué, no sabe quién soy?
• Nadie está obligado a lo imposible.
• Es que traigo prisa.

Y otras tántas que no me vienen a la mente (y que si así fuera el post tendería al infinito), y es que al final la capacidad de abuso parece que tiende allá mismo.

Ejemplos sobran, pero como muestra ésta, una de tantas:

Historias del más ojey

Las calles atestadas, no hay lugar donde estacionarse, pero ohhh, parece que ahí hay uno.... de hecho sí, hay un precioso lugar, pero es cochera. Bueno, quizás no la necesiten, además yo traigo prisa, y es sólo un ratito.
Así que me estaciono ahí, y sale un energúmeno mal educado, es decir un naquete, molesto porque le han tapado la cochera.
De hecho sin saludar ni nada comienza a gritar -Oiga, es cochera- mientras luce una jeta de pocos amigos y agita el brazo señalando el letrero oxidado que reza:

No estacionarse, cochera en servicio las 24h.

Diablos, se nota que es cochera, no sólo por el letrerito, también tiene una rampa, hay un automóvil detrás del portón y por si fuera poco también hay un feo incluido para recordarte algo que es a todas luces obvio.
Así que con la sonrisa más hipócrita de mi repertorio, evito hacerle ver que su aseveración es una perogrullada, y mejor me excuso con tono de pobre diablo -Es que, nomás voy aquí enfrente a ....-
Pero no, el troglodita está dañado de sus capacidades de conversación y seguramente el inculto nunca se enteró que es de mala educación interrumpir, así que sin dejarme terminar suelta su letanía a todas luces estudiada -Me vale que vaya enfrente o a mingar a su chadre, igual sigue siendo cochera-.
Me queda claro que estoy ante un epecialista en hacer ver lo obvio, por unos segundos considero en preguntarle si no es un X-Man y ese es su poder mutante, pero me contengo (Dios dame paciencia con los intolerantes).
Evaluo la pertinencia de explicarle que efectivamente que mi destino no cambiaría el hecho de que su puerta jodida y mal pintada sea cochera, o que sin importar quien gane la presidencia él seguirá vistiéndose pésimo... no, no funcionaría, intento la vía del diálogo, la búsqueda de acuerdos, la concertación (Afortunadamente asistí una vez a la clase de relaciones públicas, de vez en vez ponía atención, aunque he de confesar que el trasero de Viviana la acaparaba), la idea es que él viera que yo no soy el malo de la pelicula -Mire amigo, sólo tardaré unos segundos, entiendo que es su cochera, pero compréndame, no hay otro lugar libre- desarrollo perfecto, es corto como para que entienda, y aparento que me interesa su problema, pero cierro haciendo ver que ambos somos víctimas de las circunstancias.
Mi argumento es cien por ciento válido para alguién con matería gris y de mente razonable, pero mala suerte, de todas las cocheras del mundo tuve que topar con el gatekeeper más necio, a quien su escaso vocabulario no le da más que para mascullar un remedo de respuesta -Yo no soy amigo de cabrones, esto sigue siendo cochera, sea un minutito o todo el día, así que lárguese-, otra vez la burra al trigo ¿Y cuando puse en duda la existencia de la cochera?, yo le estoy hablando que tengo prisa y este animal me está haciendo perder mi tiempo, quizás no me entendió así que le repetiré -Ohh, eso lo entiendo, pero también entienda que no hay lugar, y si en vez de estar discutiendo con usted, hubiera ido a lo mio ya le habría desocupado el lugar- Tómala, in your face, a ver idiota que respondes ante eso, y efectivamente se ha quedado sin palabras, él mira su reloj, mira al cielo como pidiendo instrucciones, obviamente el cielo no le dice nada, mira al piso, mira nuevamente su reloj... quizás porque la primera vez no le entendió y apenas recordó como interpretarlo, y por fin, responde con tono magnánimo, como si me perdonara la vida -Andale pues, PERO QUE NO SE VUELVA A REPETIR-, coño "vuelva a repetir", eso es una "repetición reiterativa", mejor me ahorro el comentario y bajo del carro a toda prisa, porque con el tiempo que me hizo perder este tarado apenas voy a alcanzar a comprar los boletos y entrar a la función de las 8:00... joputa, es que la gente ya no respeta el tiempo de los demás.

Como aclaración, porque un comentario me hizo ver que no es claro que no se trata de MI HISTORIA, he editado el post con el fin de intentar ser más claro.